SISTEMAS METODOLÓGICOS DE COMUNICACIÓN

 

Existen distintas estrategias de intervención del niño sordo e hipoacúsico. Hay dos posiciones tradicionalmente encontradas que han suscitado polémicas entre los profesionales: oralistas y gestualistas.

Los sistemas oralistas: Intentan la adquisición y desarrollo del lenguaje utilizando los restos auditivos por medio de prótesis y otros medios técnicos y el uso del habla como medio de expresión. Consideran que hay que intentar el lenguaje oral usado por la sociedad oyente que eso le facilitará y le ayudará a integrarse en ella. Aunque el niño se decante por este sistema para comunicarse sería bueno que el niño/ a conociera el lenguaje de signos.

Los métodos gestuales acompañan la enseñanza del lenguaje oral con algún sistema estructurado de signos

El lenguaje de signos: Es una modalidad no vocal del lenguaje verbal humano, desarrollado por el colectivo de personas sordas. Es el sistema usado por la mayoría de los sordos educados en centros específicos. Tiene estructura interna propia y con sus principios organizativos. La estructuración gestual es distinta a la oral, es un lenguaje simplificado y con dificultad para los términos abstractos. Usan gestos naturales comprensibles para los oyentes como comer, dinero, etc, gestos específicos para los nombres de las personas y otros sustantivos, gestos para frases completas, gestos temporales que se unen al del infinitivo para formar los distintos tiempos verbales, etc.

 

Métodos mixtos: En ocasiones la intercomunicación mediante el lenguaje oral se ve limitada debido a las características propias de uno de los interlocutores. Debemos recurrir a medios auxiliares, es entonces cuando los gestos y el lenguaje oral se complementan para favorecer la comunicación. Entre los sistemas aumentativos y / o complementarios estan la comunicación bimodal (utilización simultánea del lenguaje oral y gestual, pero signando las palabras en el orden que sigue el idioma que se habla, añadiendo signos artificialmente elaborados para aquellas palabras que son omitidas (verbo ser, artículo, preposiciones), en lenguaje de signos y utilizando la dactilología para los nombres que no tienen el signo correspondiente.

 

La palabra complementada: es un sistema de apoyo a la lectura labial que elimina las confusiones orofaciales haciendo inteligible el discurso hablado. Es un sistema oral y silábico, requiere poco esfuerzo, se aplica a edades tempranas, facilita la corrección ortofónica.

 

La Dactilología: es un sistema de deletreo manual. Hay una correspondencia entre la configuración concreta de la mano y una letra del alfabeto escrito. Se suele utilizar para deletrear nombres propios, términos orales que no tienen correspondencia con un signo. También se suele emplear en el contexto educativo para facilitar el aprendizaje de la lectoescritura. Tiene un papel secundario en la comunicación.

 

La lectura Labiofacial: Es el acto de ver la palabra en la boca del hablante. Se basan la mayoría de los métodos oralistas y de la que no prescinde ningún sordo, requiere conocimientos previos del idioma. No se reconocen en los labios las palabras que no se conocen.

 

Condiciones del mensaje:

  • -Los mensajes deben ser frases enteras y gramaticalmente bien construídas.

    -Si no se comprende una frase, es mejor repetir la idea modificando la frase o acotando el tema del que se habla.

  • Condiciones del labiolector:

    -Capacidad de atención prolongada.

    -Paciencia. No abandonar los intentos de reconstrucción del mensaje.

    -Buen nivel de lenguaje.

    -Restos auditivos. Permiten una codificación conjunta con la LLF que redunda en un mejor nivel de comprensión global.

 

S.A.C
Sist ciegos